Tijuana, BC.- Los ucranianos y rusos que esperan en esta frontera en busca de asilo político en Estados Unidos suman más de dos mil 100, quienes conviven en un improvisado refugio: una estación de autobuses del poco utilizado Sistema Integral de Transporte.
Sin embargo, la convivencia es transitoria, pues EU informó que otorgará 100 mil permisos de asilo a ucranianos, pero la medida excluye a los rusos. La Dirección de Atención al Migrante calcula que en las últimas semanas arribaron mil rusos y mil 100 ucranianos huyendo de la guerra entre sus países. Volaron a la Ciudad de México o a Cancún, y de ahí se trasladaron a Tijuana.
En tanto, otro campamento se forma en las inmediaciones de otra garita internacional, la de Otay, donde organizaciones religiosas y voluntarios ucranianos que residen en EU reciben a sus connacionales en el Aeropuerto de Tijuana para luego llevarlos al nuevo campamento migrante.
De esta forma, evitan sean víctimas de los transportistas que les cobran hasta 100 dólares por traslado.
Esperan en CDMX
Edick, un ucraniano, residente de San Diego, California, asevera que busca apoyar a sus compatriotas en estos momentos difíciles. Han confirmado que algunos ucranianos se encuentran varados en la Ciudad de México tratando de llegar a la ciudad fronteriza.
“Vienen varias personas de iglesias, organizaciones y fundaciones para ayudar porque el problema es que hay mucha delincuencia en Tijuana y están estafando a nuestra gente”, indicó.
Al momento en el que arriban a Tijuana, los voluntarios los esperan con cartelones con mensajes de bienvenida, les brindan información y los trasladan a los puertos fronterizos donde otro grupo los espera.
En el nuevo campamento de Otay, hay aproximadamente 100 migrantes. Son atendidos por organizaciones religiosas que vienen desde Portland, Estados Unidos.
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